bagnetto neonato

BAÑO DEL BEBÉ: Cómo y cuándo hacerlo

Bañar a un recién nacido es uno de los momentos más especiales para todo padre primerizo, pero a menudo pueden surgir dudas: ¿cuándo hacerlo? ¿Cómo prepararse? ¿Qué productos utilizar?


En este artículo encontrarás una guía completa para afrontar el primer baño de tu bebé con serenidad y seguridad .


Desde elegir el momento perfecto hasta la rutina de limpieza adecuada, exploraremos todo lo que necesita saber para que la hora del baño sea un momento para relajarse y conectarse con su pequeño.


Descubra las mejores prácticas para cuidar la delicada piel de su recién nacido y garantizar una rutina de higiene segura y eficaz.


PD: visita nuestro perfil de Instagram @drsilva.com_official para ver cientos de videos y contenido útil.

Cómo bañar a un recién nacido: guía paso a paso

baño de bebé

Bañar a un recién nacido es un momento delicado y especial que no debe causar estrés ni al bebé ni a los padres.


Para que esta experiencia sea positiva , es esencial que se desarrolle en un entorno tranquilo y sereno , en un momento del día en que los padres puedan concentrarse completamente en su pequeño, sin distracciones.


Si bien no existe un "manual perfecto" para el baño, hay algunas precauciones simples pero efectivas que pueden garantizar el máximo bienestar de tu recién nacido durante esta práctica diaria.

Bañera para bebé: ¿es realmente necesaria?

bañera para bebés

Una bañera para bebés es una opción común , pero no obligatoria.


Existen diversos modelos en el mercado, algunos de ellos con cambiadores integrados.


Sin embargo, también es posible bañar al recién nacido en otras superficies como el lavabo del baño , siempre que esté muy limpio, o en un barreño de plástico sencillo , como los que se usan para lavar la ropa.


Si no tienes una bañera especial para bebés (del tipo con respaldo reclinable), tendrás que aprender a sostener bien la cabeza y la espalda de tu bebé con la mano antes de colocarlo con cuidado en el lavabo o palangana de plástico.


Si no tienes bañera, para aumentar la comodidad de tu bebé y ayudarte a sostenerlo, puedes colocar una toalla limpia en el lavabo y enrollarla para que actúe como soporte para la espalda y la cabeza de tu bebé durante el baño.


En cualquier caso, lo importante es garantizar la seguridad y comodidad del niño durante el baño para que pueda disfrutar placenteramente de este momento.

Temperatura del agua y ambiente ideal

La temperatura del agua para bañar a un recién nacido debe rondar los 37°C.


Es posible medirlo con un termómetro específico o hacer la “prueba del codo” , como recomendaban nuestras abuelas (sumergir el codo, una parte sensible de nuestro cuerpo, en agua para comprobar su temperatura).


Igualmente importante es mantener una temperatura ambiente en torno a 23-25°C , evitando cambios bruscos de temperatura que puedan molestar al niño.


Una vez que la temperatura sea la adecuada, puedes agregar productos de baño, como jabón o aceite de baño, y luego sumergir al pequeño en el agua.

Productos de baño: qué elegir para la delicada piel de los recién nacidos

Es fundamental elegir productos específicos para recién nacidos, libres de perfumes y sustancias irritantes .


Éstos deben tener un pH fisiológico para no ser agresivos con la delicada piel del recién nacido.


Para la limpieza, es preferible utilizar limpiadores oleosos en lugar de espumosos.


Durante los primeros días, evite utilizar champú ; El cabello de tu bebé se puede lavar con el mismo detergente que utilizas para la piel.

Cómo bañar a un recién nacido: la técnica correcta

Cómo sostener a un bebé recién nacido para bañarlo

Durante el baño, el recién nacido debe mantenerse en posición segura , sentado o semi-reclinado (es mejor semi-reclinado hasta que el recién nacido tenga el tono necesario para sostener bien su cabeza).

Para sostener adecuadamente a su bebé durante el baño , pase su mano y brazo por detrás de sus hombros , hasta que su mano quede debajo de la axila opuesta del bebé .


Comenzar mojando y masajeando suavemente la cabeza , luego proceder a lavar la cara , el cuerpo , los genitales y las piernas .


Para evitar mojar de repente los ojos y la cabeza de tu bebé y asustarlo, puedes utilizar una muselina/esponja empapada en agua y apretarla suavemente sobre la cabeza de tu bebé.


Usando la misma muselina, paño o esponja también puedes secar y lavar suavemente la cara, el cuello y la parte superior del torso de tu bebé.


Al llegar a la región genital, si tienes un bebé, asegúrate de mover los testículos para lavar bien la zona de las ingles.


Si es niña, lavar los genitales empezando desde adelante y siguiendo hacia abajo, para evitar la contaminación con heces y prevenir infecciones, especialmente del tracto urinario.

Regresar al blog